La Magia del Otoño en el Valle de Zuriza 🍁 🍄

Camino de Ansó hasta Zuriza

En el Parque Natural de los Pirineos Occidentales se esconde el Valle de Zuriza, en el Valle de Ansó, un paraíso que luce más bello que nunca en los meses otoñales.

Mapa de Acceso al Valle

Para llegar a él, tendréis que visitar primero el pueblo de Ansó, del cual no querréis marchar. Su arquitectura pirenaica lo convierten en un enclave acogedor. Desde allí parte una carretera que lleva hasta el Valle de Zuriza, siguiendo el curso del río Veral entre las piedras de las montañas. Un paisaje en el que os recomendamos tener los ojos bien abiertos, ya que es de una gran belleza.  El camino también lo podéis realizar caminando. Una ruta sin dificultad, señalizada, pero que os costará cerca de cuatro horas acabar. Cuando lleguéis os encontraréis con un camping, con albergue, bungalows, zona de acampada…

Camino de Ansó hasta Zuriza

Se pueden realizar múltiples excursiones. La que os llevará hasta los hayedos es la que tendréis que tomar en el puente del Vivero. El recorrido está indicado y más o menos tiene una distancia de 6 kilómetros. Antes de partir informaros de la climatología (no vaya a llover) e id preparados, la montaña es peligrosa. Un buen calzado, agua, móvil y ropa de abrigo serán fundamentales en vuestra excursión. Allí se ubica el Hayedo de Zuriza, considerado como el único hayedo puro que existe en Aragón.

¿Qué os espera? Una gama de colores que irá variando a lo largo que el otoño se instale en la región. Tonos rojos, amarillos e incluso morados decorarán los árboles de la zona, sobre todo en el trayecto que va desde Ansó hasta Zuriza. También os sorprenderán los colores del barranco de Tachera y el de Linza. Son rincones fotogénicos. Eso sí, dejad la cámara a un lado durante un rato y respirar a la vez que observáis y sentís la magia del Pirineo aragonés.

Os dejamos esta ruta, recomendada por RedAragon, que os llevará desde Zuriza hasta las Tacheras en el Valle de Ansó, un recorrido fácil que os permitirá disfrutar de todo el esplendor del lugar.

Fuente de imágenes: Un cuaderno de viaje y Camping Zuriza