4 Excursiones idílicas para disfrutar del deshielo 💦🌲 – PARTE 1

Cuando la nieve comienza a derretirse, dejando desnudas las cumbres más altas, el agua brota por los ríos creando mágicas estampas en las que este líquido es el protagonista, y convierte las cascadas en espectáculos de la naturaleza todavía más bellos. Por eso, os proponemos 4 excursiones para disfrutar de las caídas de agua en su máximo esplendor.

1 – Aiguallut, en valle de Benasque

Forau de Aiguallut es probablemente una de las excursiones más realizadas en el valle de Benasque. Aquí desembocan las aguas que provienen del glaciar del Aneto. Primero lo hacen en su pradera, para después precipitarse por la impresionante cascada, que en estos meses de primavera luce de manera mágica; y llegar finalmente a la sima. Este bonito paisaje está ubicado en el Parque Natural de Posets-Maladeta. La excursión, de 4,5 kilómetros, se inicia en La Besurta y tiene un desnivel de 130 metros, así que se puede hacer en familia.

2 – La Cola de Caballo en Ordesa

Otra de las cascadas más conocidas en la provincia de Huesca es la Cola de Caballo del Parque Nacional de Ordesa y Monteperdido. La ruta comienza a pie en la pradera de Ordesa y se desarrolla durante 16 kilómetros (ida y vuelta). Todo para vislumbrar esta bonita cascada, pero también para disfrutar del camino y sorprendernos ante las Gradas de Soaso. Durante los meses de verano, no se puede acceder a la pradera en coche, solo en un autobús que parte desde Torla, pero tanto en primavera como en otoño sí se puede llegar por la carretera con vehículo propio.

3 – Cascada de Sorrosal

La cascada del Sorrosal, ubicada en el barranco del mismo nombre es un afluente afluente del río Ara. Se encuentra junto a la localidad de Broto y puede accederse a ella en apenas 5 minutos por un cómodo sendero que parte desde la propia localidad de Broto. Las vistas son espectaculares y se puede llegar hasta la misma base de la cascada. Para los más atrevidos, y siempre con la equipación adecuada, existe una vía ferrata que asciende hasta la parte superior de la cascada y remonta un tramo de barranco. También es posible realizar el descenso de la cascada mediante rapel.

 

 

4 – Cascadas del Cinca – Valle de Pineta

El Valle de Pineta se abre en su cabecera en un amplio circo, ofreciéndonos una de las visiones más idílicas del Pirineo. La mole de agua emerge en un verde mar sobre un recién nacido río Cinca, realmente es un espectáculo mágico, la magia de Huesca.

Desde las praderas y aparcamiento de Pineta tomar la pista que atraviesa la zona de acampada y se interna en un frondoso bosque de hayas, contornea la base del circo y cruza un puente que salva el río. Avanzando en dirección noroeste cruzamos un vestido manto de helechos y tomamos un camino a la izquierda que atraviesa una pedregosa ladera y accede hasta la parte inferior de una de las cascadas.

El tiempo de acceso es de aproximadamente 1 hora.

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