Nuestra provincia es una zona privilegiada para la alta gastronomía. Tenemos el oro negro (la trufa), el oro amarillo (con nuestros deliciosos aceites de oliva virgen) y ahora el azafrán, también conocido como el oro rojo, es una de las especias más caras del mundo, con un sabor maravilloso y con muchos beneficios para la salud.

Por eso, no podíamos dejar de hablar de este delicado producto, cultivado en varias zonas del Altoaragón.

Escasez de lluvias, veranos calurosos y secos, y los fríos inviernos con leves precipitaciones son las condiciones climáticas propicias para el cultivo del azafrán en el Altoaragón.

La campaña del azafrán se limita a unos días: cuando la planta florece, hay que recoger las flores y, después, extraerles las hebras de color granate. Son cuatro hilos, a veces cinco, lo que se considera algo extraordinario. Todo artesanalmente, por lo que supone un gran esfuerzo. En torno a la festividad del Pilar, se recoge toda la producción del año. El resto del tiempo, hay que preocuparse de mantener el cultivo, abonarlo, limpiarlo de malas hierbas y luchar contra las plagas, como los ratones.

Fuente: https://jacetaniaexpress.com

El alto precio por tanto se debe a la laboriosa crianza y cosecha.

Cultivo y Venta

En Huesca podemos encontrar 3 productores, el Azafrán de Atarés en la zona de Jaca; el Azafrán d’Estaña y Azafrán de Benabarre, en la Ribagorza y el Azafrán de Castilsabás en la Hoya de Huesca.

Beneficios para la Salud

Además de ser ingrediente estrella de una buena paella, el azafrán es mucho más. Tiene un efecto positivo en la psique y ayuda a combatir la depresión. Es un protector celular a través de una alta concentración de antioxidantes, es afrodisíaco y oler la especia podría ayudar a aliviar los síntomas típicos del síndrome premenstrual.