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Cada religión tiene sus propias fiestas. Una que está apunto de suceder es el Año Nuevo Tibetano. Para poder conocer cómo se celebra sólo tenéis que viajar hasta Panillo y uniros a los festejos que tienen lugar entre el 18 y el 20 de febrero.

Las celebraciones están abiertas para todos los públicos. Es un momento importante dentro del calendario budista que tiene lugar tras los primeros días de luna creciente del mes de febrero hasta la siguiente luna nueva. Los rituales que se practican tienen como finalidad acabar el año que se va y empezar de manera pura el que llega. Una transición positiva para encarar lo que viene. Hay que tener en cuenta que, según la religión budista, todos los efectos de las buenas prácticas realizadas durante el primer mes del año lunar se multiplican por 100.000.

El 18 de febrero hay luna llena y es el último día del año, cuando se lleva a cabo la plegaria Shangpa Mönlam. Es una jornada para la oración en la que los monjes rezan ininterrumpidamente para conseguir acabar con lo malo. El 19 es el Año Nuevo Tibetano y se celebra con el ritual de Guru Rinpoche, la ofrenda Tsok KönChok ChiDü, y la ceremonia de ofrenda de humo blanco Ri UoSang Chö. En Panillo tiene lugar la gran fiesta del Lösar con oraciones, cánticos y colorido que tienen como finalidad traer la paz al mundo. No falta el té, el arroz, las pastas de harina y los instrumentos tradicionales. Todo ello con un simbolismo. Además el templo se llena de pañuelos blancos (katas) de buenos deseos que se entregan en ofrenda a los monjes, se ora y se realiza la ofrenda de humo blanco purificador y el lanzamiento de un puñado de harina al cielo.

La celebraciones finalizan el 20 de febrero con la lectura de la Prajnaparamita. Una fiesta única en el Pirineo. ¿Queréis vivirla en primera persona? Para confirmar horarios lo mejor es que os pongáis en contacto con la Secretaría del Centro llamando al 974347009.

Fuente de imágenes: Dsk Panillo