¿Viajáis con niños? Entonces estáis de enhorabuena, porque en otoño la provincia de Huesca esconde tesoros mágicos, en forma de actividades en la naturaleza, perfectos para realizar con los más pequeños de la casa. Jugar en los árboles, saltar desde una tirolina, mantener el equilibrio… son las propuestas de los parques de arborismo que habitan las montañas altoaragonesas. ¿Nos acompañáis en este viaje por la naturaleza? Os prometemos que la diversión está asegurada.

La tirolina más larga del Pirineo

Si os acercáis por Villanúa, no podéis dejar de pasar por la tirolina más larga del Pirineo: de 160 metros. Esta se encuentra en Amazonia Villanúa, un parque de aventuras con 72 juegos en los árboles y 16 tirolinas, divididos en cinco circuitos de aventura. La zona infantil, para niños de entre 4 y 7 años, emulan los recorridos de los mayores en un circuito a ras de suelo y sin arnés. Por su parte, Kids también es para niños, con 12 juegos a una altura media de 1,5 metros, como una pasarela, un paso de gigante, una red birmana, una tela de araña, una tirolina o unos toneles, entre otros. El circuito Explorador lo pueden realizar tanto niños como jóvenes, ya que está compuesto por 14 juegos de poca complejidad y una altura media de 2,5 metros. Balancines, troncos o tirolinas, entre otros, conforman esta opción. Por último, tanto Aventura como Deportivo son dos circuitos de mayor dificultad y altura, solo aptos para jóvenes y adultos, en los que la adrenalina está asegurada. Sólo aptos para los más intrépidos. Podéis encontrar más información en la página web del parque.

Colores de aventura

A poco más de 800 metros de la plaza del Ayuntamiento de Biescas se encuentra Biescas Aventura. Si queréis vivir como lo hiciera Tarzán, este parque ofrece 80 juegos en 8 circuitos de diferente dificultad. Descolgarse de lianas, atravesar pasarelas, dejarse caer por tirolinas, subir rocódromos, conocer plantas y especies de árboles, atravesar puentes tibetanos, recorrer senderos, hacer jogging… son las actividades que ofrece este parque, el más seguro de Europa. Disponen de dos circuitos de entrenamiento, con los que enseñan a moverse en altura para garantizar la seguridad posterior en la actividad. Además, tienen circuitos repartidos por colores, según el nivel de dificultad.  El amarillo es exclusivo para los más pequeños de la casa, el verde 1 sirve para iniciarse en la actividad, y el verde 2, para coger soltura. En el azul la habilidad y el equilibrio se ponen a prueba, mientras que el rojo es para los más aventureros. Por último, las tirolinas son el broche final para dejarse llevar tras el esfuerzo y descargar emociones y adrenalina. Más información en Biescasaventura.com.

Un paseo por las copas de los árboles

Un paseo por las copas de los árboles. Es lo que proponen desde el parque Verticalia, donde, además de arborismo, ofrecen todo tipo de actividades de aventura como rafting, quads, buceo e incluso puenting. Para ir con los niños también es idóneo, ya que permite descubrir el mundo desde las ramas de los árboles. Las tirolinas, las tablas colgantes, los puentes tibetanos, las escaleras móviles, las redes y los columpios harán las delicias de los más pequeños y de sus acompañantes. El parque se sitúa en Murillo, a las orillas del río Gállego. Y, aunque pertenece a la provincia de Huesca, forma parte de la Hoya de Huesca, y se encuentra a menos de 40 kilómetros de la ciudad de Huesca. Podéis encontrar más información en la página web del parque. 

Además, si os acercáis por los Monegros, no olvidéis una visita al parque La Gabarda, donde la aventura os está esperando, incluso en un laberinto de maíz. Mientras que en la Selva de Oza, en Hecho, la adrenalina está a la vuelta de la esquina, concretamente en Val d’Echo Activa, con juegos de equilibrio y tirolinas en los árboles.

¿Hacia dónde vais a dirigir vuestra aventura?