Excursión al valle de La Ripera para este 🍁 Otoño e ☃️ Invierno
Panticosa se encuentra en el valle de Tena, junto a la confluencia de los ríos Caldarés y el Bolática.
En la parte sur del pueblo, desde el parking, avanzamos unos metros con dirección noroeste y tomamos una calle que baja paralela al barranco encajado del Monde. Este cauce desemboca en río Caldarés, que nosotros tenemos que cruzar por el bonito y bien conservado puente construido en 1.556 por Beltrán de Betbedé. Al otro lado del puente giramos a la izquierda y continuamos hasta un poste donde confluyen el PR-HU 92 y el PR-HU 106.
Nos encontramos justo detrás del edificio de la estación de esquí, debajo de la telecabina y al lado de un cartel indicativo del PR-HU 95, sendero que vamos a seguir durante casi toda la excursión. Siguiendo la señalización del sendero de pequeño recorrido, nos adentramos en un bosque de frondosas, remontando el río Bolática.
Cuando llevamos recorridos 1,8 km desde el inicio, cruzamos el río por el puente de la Zoche.
Ya en la otra orilla, la ruta asciende entre árboles hasta llegar a las praderas de La Selva, salpicadas de rosales silvestres. La presencia de ganado en la zona desdibuja la trazada del sendero y debemos continuar llaneando hasta pasar al lado de un refugio de pastores.
A los pocos metros cruzamos el barranco que baja del pico Faceras. El recorrido es cómodo y agradable, ya que el entorno del valle rodeado de montañas (en invierno nevadas) –como el pico Faceras o la punta de Piniecho–, compensan considerablemente la distancia y el desnivel de la ruta.
Tras las praderas nos adentramos de nuevo en el bosque, siguiendo el PR-HU 95 hasta que, a los 4,6 km de recorrido, llegamos a un cruce donde abandonamos el sendero homologado y tomamos la senda de la izquierda, que nos lleva a cruzar el puente de Aulot sobre el río Ripera.
Al poco tiempo de cruzar el cauce, salimos a una pista que remonta el valle de La Ripera y que, en unos 300 m, nos sitúa en el refugio no guardado del mismo nombre. Desde la pequeña cabaña podemos ver, al fondo, las cumbres nevadas de la sierra de Tendeñera.
Desde donde nos encontramos podríamos bordear el cerro Ripera y continuar hasta el ibón de Sabocos; pero como la ruta se alargaría demasiado, regresamos a Panticosa desde la cabaña de La Ripera por el mismo camino.
Misma excursión en raquetas de Nieve para el Invierno
Esta ruta es preciosa para realizarla también en invierno con raquetas de nieve. Las raquetas de nieve son unos utensilios que se acoplan a las botas y sirven para desplazarse con más comodidad y rapidez sobre terrenos nevados, utilizándose sobre todo en la práctica del senderismo en invierno.
Gracias a que el peso de la persona se distribuye sobre una superficie más grande, el pie no se hunde y permite desplazarse con relativa facilidad. Esta excursión de raquetas tiene una longitud de 5,2 km, contando solo la ida, así que es muy importante que la ruta se prepare bien desde casa, ya que hay que tener muy claro el itinerario, conocer el nivel de todos los raquetistas, mirar la previsión del tiempo y controlar las horas de luz, puesto que en invierno se reducen considerablemente.
También es aconsejable salir al monte con un mapa de la zona. Una vez que estamos equipados, nos disponemos a iniciar la ruta desde el aparcamiento de la estación de esquí de Panticosa, en la parte sur del pueblo.