🌲 Imponente Excursión a la faja de la Pardina desde Cuello Arenas
Paredes verticales, desfiladeros y viejas construcciones pastoriles serán nuestra referencia y compañeros de trayecto en esta ruta de alta montaña, por el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.
Tipo de recorrido: Circular
Horario: 2 horas 45 minutos
Desnivel negativo: 150 metros
Desnivel positivo: 150 metros
Distancia Total: 9.6 kilómetros
Altura máxima: 1.931 metros
Altura mínima: 1.710 metros
Severidad del medio natural: 3
Orientación en el itinerario: 2
Dificultad en el desplazamiento: 2
Cantidad de esfuerzo: 2
Partimos de Cuello Arenas, junto a la pista que sube de Nerín. A los pocos metros, nos encontramos con el refugio de pastores conocido como la Casa d’o Puerto.
Vamos llaneando varios metros y, casi sin darnos cuenta, nos encontramos junto al barranco de la Pardina. Estamos rodeados de un paisaje alpino espectacular, con praderas de altura y cimas de más de 3.000 m, tales como el Cilindro de Marboré, Monte Perdido, el pico Añisclo y la Punta de las Olas.
Cruzamos el pequeño cauce del barranco, y poco a poco, nos desviamos a la derecha. En este tramo de la ruta, tenemos que estar muy atentos, porque aquí se unen las dos fajas que vamos a recorrer.
Primero bajaremos por la faja de la Pardina y regresaremos por arriba, siguiendo la faja Malpasé. Así, tomamos la faja de la derecha, que recibe el mismo nombre que el barranco, y seguimos hasta la mallata de Fogaril, excavada en la roca. Se denomina mallatas a los refugios donde los pastores hacían noche y se resguardaban del mal tiempo.
Continuamos llaneando hasta que pasamos otra mallata, esta vez adosada a la propia faja. A poco más de 3,5 km desde el inicio, nos encontramos con el hermoso salto de agua de Ballisaco.
Seguidamente, llegamos al espolón de la peña O Candón, lugar desde el que se contempla la cabecera del cañón de Añisclo, el hayedo de la Ripareta y los picos de Sestrales.
Desde este punto, después de una fuerte y corta subida, equipada con grapas, cadenas y sirgas de seguridad, dejamos la faja de la Pardina y comenzamos el regreso circular por la faja superior, la de Malpasé.
Antes de llegar a la faja, el camino pasa junto a varias cabañas, como la de Candón y la de Pedro Chuan, situadas en una zona abierta de pastos. A continuación, llegamos al paso de Malpasé, bautizado así por los pastores por el riesgo que suponía para el ganado.
A menos de un kilómetro de aquí, se encuentra el desvío que utilizamos antes para adentrarnos en la Pardina. Desde el cruce, regresamos a Cuello Arenas por el mismo camino.
Fuente: http://gps.huescalamagia.es
